martes, 9 de noviembre de 2010

Hablemos de la cocina.

La cocina pertenece a un espacio muy dentro del hogar, es el lugar mágico (a mi parecer), donde se elabora todo aquello para el alma, desde un caldo de pollo, hasta una pasta con albahaca y aceite de olivo, sin embargo, al igual que la vivienda, la cocina, es un espacio en peligro de extinción, día a día son menos los metros cuadrados destinados a ella, como si tener una estufa con cuatro quemadores, sin horno, muy al estilo de una parrilla fuera a bastar para elaborar los alimentos para toda una familia, la cual puede ir desde 4 integrantes en adelante.

A veces como mínimo, elaborando los 3 sagrados tempos para alimentarse.

Nos dicen que más es menos, y que menos es más, pero como Mexicanos, tenemos el legado de esas hermosas cocinas de leña que eran el corazón del Hogar, la mezcla de especias para formar el mole, el pipián, las salsas, los caldos, las aguas frescas, un sinfín de aromas, colores, texturas, sabores, formas y tamaños, teniendo como resultado una alimentación nutrida, saludable, económica.

Pero, como en un cuento de espantos donde la llorona diría: ay mis Hijos!, ay mis Hijos!, creo que hoy podríamos decir, hay los trastes, hay la comida, ay ya no cabe nada, no se si culpar a Corbu, O’gorman, al Infonavit o a las nuevas constructoras de la vivienda moderna, tendríamos que culparnos nosotros mismos, después a los diseñadores de los espacios inhumanos que hoy se venden (que no todo el tiempo son arquitectos, también se avientan sus pininos, uno que otro ingeniero electromecánico, diseñador grafico y hasta licenciados en derecho me ha tocado) , pasando por los diseñadores de los mobiliarios que utilizamos, y terminando con nuestro bendito gobierno, que aprueba toda esta gran cantidad de sandeces, no anexo imagen en este post, pero si les digo que en lugar de salir a cenar, mejor le retomen el amor a su propia cocina, al final se gasta menos, se retoma el amor por la cocina y se le regresa el lugar que este mágico espacio debe de tener.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Ultimo cuarto.

Descubro que no soy tan diferente, que no todo es imparcial, inmoral o fuera de lo normal.

Sin embargo, que es normal?

Y para ser honesto, no me agradan las mentiras a medias, la doble moral y la injusticia del Yoyo!, un día no mirare atrás, los ciclos de la luna, el agua y la vida siguen rotando, la madrugada es lo que más me cobija, y es el calor de aquello que en realidad parece una duplicidad de mi persona, que veo desde el otro lado del espejo, atrapado, esperando romper la ventana, salir y volver el mundo atrás, retirado, jodido, marchito.

Estas allá afuera, esperando que llegue por ti.

O será que en verdad estoy esperando que lleguen por mi?

viernes, 28 de mayo de 2010

Música para finalizar la semana.

En ocasiones, uno necesita una buena canción para el recorrido diario, en veces, parece que todo se pone en un orden celestial, el dia no fue malo, el clima se presta, el sol no molesta, el recorrido ya sea en el auto o en el taxi es ameno, y solo falta que una cámara nos siga con ese perfecto soundtrack, hoy me paso algo similar, un soundtrack urbano, música privada, de dudosa procedencia que solo mi Sis sabe de donde lo saco, luego ya en el taxi, parece que el i-pod se pone en sintonía de las canciones anteriores, esta es la canción que te decía sis, el cover de radiohead, muy padre, muy buena canción.
Para finalizar, el dia de hoy ya es viernes, esperando el próximo jueves para volver a repetir la platica, Thanks sis.

lunes, 10 de mayo de 2010

Remodelaciones.

Aunque el nombre es el mismo, de dulce, chile y manteca, queda muy adoc a lo que viene, reacomodo mi blog para artículos de aquello que pueda interesar, historias, anécdotas y bueno, aportaciones al medio en que me desarrollo y desenvuelvo.
Entregas semanales o quincenales.

jueves, 8 de abril de 2010

Noches de arquitectura.



Ya a una semana de cerrar cuatrimestre, largas desveladas, concurso en puerta y mil y un cosas por hacer, uno se da cuenta que en la madrugada pasan cosas raras, mas de las que uno pueda querer, por ejemplo, ver zancudos del tamaño de un pokimon, hay le encargo algún interesando que quiera uno de casi 4 cms, y bueno, arreglar una maqueta que parece que bailaron jarabe tapatío sobre ella.
Aun asi, recordar cosas bonitas, platicas sencillas como monólogos donde uno es el único protagonista, armar una lista psicodepresiva, un decir I BELIVE! y además de todo, Sentirse como un pirata, donde el único botín es aquello que no tiene precio.
Canciones de hace años, donde aun existía more fm y decir un buenos días por e-mail.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Noches de Arquitectura.


Cuando ya nace un nuevo día, en plena madrugada, la luna se asoma por la ventana, las navajas se desgastan y el material se acaba, bocanadas de humo y frio al exterior, y mi corazón coquetea al ver el lente en la otra habitación, coqueteo a la cámara, ver que hay tras esa mirada voyerista, ver a través de un visor bajo un lente reflector, dicta mi inocencia de niño perdido en el país de nunca jamás, y hacerte volar sobre un viejo pedestal, disparar una y otra vez sobre el reflejo del histograma no bien definido de lo que dicta mi destino; acaso persigo un nuevo camino, tal vez a tu llegada, mis manos no dejaran de tocarte, desvestirte y manosearte, ultrajarte hasta dejarte desgastada y buscar una mas sofisticada, cambiarte de modo transcendental, y volar, disparar y volverte a ultrajar, quiero que me seduzcas con tu manual, lentes intercambiables y recargarte de manera singular, llevarte de viaje al centro del cosmos y hay dejar memorias olvidadas de un corazón a modo de silenciador.

lunes, 22 de marzo de 2010

Noches de Arquitectura.


Proyectos de 24 horas, a ultima hora, son los mejores, hacen que uno resuelva en ultimo momento aquello que tenia mas de 2 semanas para pensarse.
Para esto se requiere una jarra de cafe, buena musica y mandar a la fregada tod@s los procedimientos y metodologias, lo mejor, sale de la nada, en plena madrugada, con el tiempo encima, al final de cuentas es lunes y ni las gallinas ponen.